Entradas

cuando vos estabas

Imagen
Qué verdiazul era la mañana temprano cuando vos estabas qué de rocío y de hojas qué de seguras pisadas qué de sueños, qué de sueño qué verdiazul y mojada era la mañana cuando vos estabas Qué de violeta eran las tormentas sobre el mar cuando vos estabas qué de rayos y estampidas y reírse fuerte en el agua salada qué inundación constante de truenos y abrazos de horizonte y de cielo violeta cuando vos estabas Qué amarillo era el cielo cuando vos estabas amarillos cirros, amarillas luces amarillos vuelos y amarillos tornados amarillo el mundo entre nuestros ojos nuestros silencios cálidos y nuestras palabras qué amarillo era mi cielo cuando vos estabas Supimos ser color supimos ser ansia supimos noches de ventanas deshojadas supimos ser niña, ser hombre, ser gente supimos canción de madrugada supimos nadar sin orillas sabiendo sin saber qué nos esperaba supimos ser semilla supimos ser todo supimos ser nada Qué ver...

hora

Imagen
es la hora de las brujas las que danzan sobre mí desaparezco tras mi creación estado impecable para ser a esta hora cuando todo es solo cuando el aullido suena mudo y la risa es un girasol al caer la luz derraman mis palabras  -las que no son mías- su esencia fuera de mí contando semillas trivialidades escalones gotas frías y fuego azul desarmo mi cuerpo para guardarlo en aquel rincón triangular y mi pelo vuelve amorfas mis ideas es la hora de las brujas las que danzan sobre mí años luz de recorrido milenios de repetición un hombre dormido una mujer esperando sin esperar que llegue lo que nunca se fue que aparezca de repente tan callada  resonante terminal y creadora el alma con su verdad

uno

Imagen
Los colores no existen por separado. No puede haber sólo blanco, sólo negro. Y por lo tanto, tampoco puede haber sólo blanco Y negro. Todo es UNO. Hay una unidad detrás de todo. O subyacente, o envolviendo todo. El silencio y la palabra, tampoco existen. Son sólo ocasiones con que se pintan los movimientos de ese todo. Palabra y silencio son UNO. Por eso tampoco elegimos a nuestro antojo cómo y cuándo utilizarlos. A veces sucede que un grupo de palabras torpes equivale a un silencio que se nos escapa. Y a veces a la inversa, un silencio espeso y obstinado es un cúmulo de palabras que tienen miedo de ser. (Como si algo pudiera dejar de SER, solo por tener miedo…) Escuchando en silencio aparece el sonido. Y creando sonido damos lugar al silencio. Mirar a los ojos es hablar. Con o sin palabras que lo acompañen. Y por eso da miedo. Vértigo de conocer lo que hay detrás de los ojos del otro. Vértigo de saberlo. De tener que hacernos cargo de que lo sabemos. De darnos cuenta ...

cenizas

Imagen
Los rescoldos de nuestro pasado queman aún ardientes y luego son solo carbones Pero debió existir el fuego inexorable y primero que nada la madera El fuego que la quema es primero ardor elucubrando una magia toda fascinación volviéndola materia renegrida y corazón de aire Y ahí es cuando encendemos el carbón ya utilizado  por otros fuegos anteriores, pretéritos con el del hoy Consume en volátiles chispas fulgurantes brasas y sonidos ancestrales la madera que conservaba apenas su esencia Y allí en ese momento una nueva magia se desenvuelve frente a nuestra sabia mirada: llegan la madera el carbón y el último fuego a volverse cenizas

insomnio de sueños

Imagen
Tengo el insomnio de la falta de sueños. Me falta el sueño porque no sueño. Despierta. Sueño dormida, porque estoy dormida. Insomnio de sueños. Buscaré el amanecer donde todo el sueño termina y empiezan los sueños. Soñaré otra vez.

extraño

Imagen
estar / ser 
silenciosa verborrágica miradora entrelazada a distancia sentada mirada caminando respetada acostada telepática nombrada delirando reflejada fresca besada musical asombrada eléctrica apasionada toqueta atravesada ardiendo 
con vos

el jardín

Imagen
y en mis sueños quiero  que me dedique un jardín que construya rincones para mí, para mi ser,  para mi calma, para mi corazón que siembre semillas, plante brotes, madres e hijos multiplicándose  sólo para que yo respire en medio de su vida la otra, la de afuera, la que es la misma que la mía mis células multiplicándose asimismo y muriendo libres caminando, sentada en ese jardín, el mío el que hizo para mí para mis sentidos con sus aves, sus insectos sus aromas y el sonido del viento una hamaca, así, tradicional para mis huesos alegres, tristes,  cansados y renovados lo quiero imaginando haciendo planes con las manos en el aire y mis pies descalzos  recorriendo la realidad de su imaginación un jardín para mí para mi vida, porque el jardín de mi vida ya lo hice yo