Mis palabras
Las palabras no son mías Se sueltan de mí al soñar Habitan mis sonrisas y se van Mis palabras son de nadie no las quieran reclamar Habitan los silencios y se van Palabras que son de arena sonidos que devuelvo al mar Lechuzas en mi ventana Grillos de noche Susurros de sal Las palabras que tienen dueño mueren antes de empezar a hacer su camino de polvo de viento y eternidad Dejen mis palabras quietas mudas, sordas, dormidas quizás Cuando despierte el alba solas, solitas se harán escuchar