uno

Los colores no existen por separado. No puede haber sólo blanco, sólo negro.
Y por lo tanto, tampoco puede haber sólo blanco Y negro.
Todo es UNO. Hay una unidad detrás de todo. O subyacente, o envolviendo todo.
El silencio y la palabra, tampoco existen. Son sólo ocasiones con que se pintan los movimientos de ese todo.
Palabra y silencio son UNO. Por eso tampoco elegimos a nuestro antojo cómo y cuándo utilizarlos.
A veces sucede que un grupo de palabras torpes equivale a un silencio que se nos escapa. Y a veces a la inversa, un silencio espeso y obstinado es un cúmulo de palabras que tienen miedo de ser.
(Como si algo pudiera dejar de SER, solo por tener miedo…)
Escuchando en silencio aparece el sonido. Y creando sonido damos lugar al silencio.
Mirar a los ojos es hablar. Con o sin palabras que lo acompañen. Y por eso da miedo. Vértigo de conocer lo que hay detrás de los ojos del otro. Vértigo de saberlo. De tener que hacernos cargo de que lo sabemos. De darnos cuenta de que no sabemos qué hay detrás. Y en el fondo de que tampoco podemos saberlo.
Ir y venir. Entre palabra y silencio. Entre silencio y palabra.
Y sobre todo, aprender el camino. Y al conocerlo, reformularlo. Infinitamente.









Comentarios

  1. hermosas palabras e imágenes... Abrazo

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  2. Estoy trabajando mucho en estos conceptos. En que somos uno. Todo es uno. Cuesta para la mente, pero el corazón -abierto- lo entiende más fácil: vivenciándolo. =)

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    1. ¡Es tal cual Ceci! Es difícil, estamos programados culturalmente de otra manera... pero bueno, los breves momentos en que uno vislumbra eso, está bueno aprovecharlo para aprenderlo un poco, relaja mucho.
      ¡Saludos!

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  3. Me emociono este relato tuyo, esas meditabundas palabras, vengo tratando de reconocer la unidad, sin juzgar la experiencia solo observar sin clasificar, tratando de dejar el dividir, dejar ir los conceptos, la dualidad, no es fácil, lo intento. Gabriela

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    1. Claro que sí Gabriela... es muy difícil. Aunque no debiera, ¿no? Pero lo es...
      Este relato nació más basado en la relación entre hablar y no hablar, como una elección que cada uno hace de forma diferente y que dice mucho de cada uno, pero que a la vez siento que da un poco lo mismo, el que no habla habla con su silencio y su omisión, y el que dice a veces calla mucho de lo importante...
      Y bueno... todo es una gran unidad, ¿no?
      Gracias por comentar.

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